Las olas peruanas son fuente de riqueza. No solo nos dan grandes paisajes y deliciosa comida: también nos regalan campeones como Álvaro Malpartida. En este post, el tablista peruano nos propone 4 excelentes destinos para viajar, pasarla bien en la ruta, y disfrutar de las olas peruanas.
Cerro Azul “A solo hora y media de Lima, en el km 131 de la Panamericana Sur. Tiene una ola muy perfecta (buena para empezar a correr tabla: la playa tiene una sección muy amigable donde dictan clases). También tiene los cevicihitos al frente, y un feeling de playa y pueblo muy bonito. Además, puedes correr tabla en Cerro Azul y luego irte a hacer rafting en Lunahuaná, que está cerquísima, y pasar un día de mucha adrenalina en el agua”.
Cabo Blanco “Es una de las olas más perfectas del Perú. La de Cabo Blanco es una ola de salón (perfecta) y tubular; además, visitar su playa incluye estar bajo el sol del norte, con calor todo el año. Una de sus cosas más especiales es ir al Restaurante La Nana, uno de los mejores del Perú, y comerte un ceviche norteño. Además, tiene el Panic Point, una ola increíble. Y tiene una pesca buenísima: con merlines y peces espada enormes. Cabo Blanco impresiona a cualquier visitante”.
San Gallán “Me parece un buen lugar: está cerca a Lima y siempre es bonito estar en Paracas, porque tiene hoteles buenazos donde puedas pasar la noche y salir temprano al día siguiente para San Gallán a correr tabla. En el camino a la isla, pasas por El Candelabro que es espectacular; cuando llegas a San Gallán te sorprende la perfección de la ola, pero también la belleza de los lobos marinos que descansan en la isla y nadan en el agua. Es un lugar muy natural”.
Chicama “Esta playa es especial porque está en la mitad de la costa del Perú, y porque tiene la ola izquierda más larga del mundo. De hecho, en febrero pasado, la Marina de Guerra del Perú determinó que Chicama sea la primera ola del mundo protegida por ley. El Chicama Surf Resort que está frente a la playa es de lujo, y tiene muchas facilidades para los que vamos a surfear (como un sistema de botes que te jala para que alcances más rápidamente las olas). Pero solo con estar en la playa te das cuenta de la belleza de la naturaleza en crear una ola así”.