Chinchero
La primera parada es en el distrito de Chinchero, a sólo 28 km del Cusco y a la mitad del camino para llegar al Valle Sagrado de los Incas. Para visitarla, se pueden tomar taxis (40 min.) o contratar un tour en la ciudad.
En la época incaica se hizo conocido por albergar nada menos que la Hacienda Real de Túpac Inca Yupanqui. Hoy el pueblo es famoso por el mercadillo que se organiza los días domingo, donde se pueden comprar textiles de estilo precolombino y artesanías de la región. Antaño los pobladores intercambiaban sus productos por otros, bajo la modalidad del trueque.
En Chinchero aún se conservan importantes vestigios arqueológicos, que como en muchos otros casos en la sierra central, son una combinación de cimientos incaicos sobre las que yacen construcciones españolas. Una de las más emblemáticas es la hacienda de Mateo Pumacahua, el curaca más importante del s. XVIII, la cual se encuentra en la zona de Huayocari.
Circuito Maras y Moray
A media hora del pueblo de Chichero se encuentra Moray, un asentamiento incaico cuyo principal atractivo son unos andenes circulares y de gran profundidad. Por las características del terreno y el clima, se cree que este fue un centro de domesticación, aclimatación e hibridación de plantas, haciéndolas óptimas para el consumo humano.
A sólo 7 km. de esta localidad, se encuentra el pueblo de Maras, un mirador natural para observar el valle del río Urubamba. Muchas de sus casas ostentan antiguos escudos labrados en piedra, que reflejan el pasado nobiliario de sus antepasados.
En la región noreste de este pequeño pueblo están las salineras de Maras, conformadas por unos 3 mil pozos salineros. Cada tres días, los pobladores se encargan de “regar” los pozos, para que luego de la evaporación del agua, se solidifique la sal. Cuando ésta alcanza los 10 cm, se recoge y se empaca para venderla en los pueblos cercanos. De aquí proviene la recientemente popular “sal rosada de maras”.
En globo por el valle sagrado
Si quieres vivir una experiencia única y conocer el valle del Urubamba en toda su extensión, no te puedes perder esta aventura: sobrevolarlo subido en un globo aerostático. Los vuelos en globos es una novedosa opción para los amantes de emociones intensas. Un vuelo de una hora aproximadamente cuesta entre US$ 350 y US$ 400, y se realizan muy temprano por las mañanas.
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